Disfrutaría contar que algo anda del todo bien, pero estamos en este lugar y debemos ser conscientes en donde convivimos todos. Pero por más que la pintemos de cualquier color lo que mata es el olor. El Si esta todo con perfume de basural a la intemperie. Por estos lares el Presidente de la Comisión de Educación, el Edil Mario Rodríguez UCR, se dio una vuelta por la escuela Número 12 en el Barrio Autódromo para verificar el estado de la misma. Esa escuela secundaria se encuentra en pésimo estado, al igual que la mayoría del país. Veinticinco años de Gobiernos Peronistas pueden replicar y dar fe. Nadie en este hermoso país bananero, hace nada por la Educación pues fabricar brutos y pobres, siempre ha sido un gran negocio. El Vice Director Diego Fornoni menciono que en reiteradas oportunidades se comunicó con el Concejo Escolar, pero nadie le ha dado pelota. La Provincia de Buenos Aires mediante su Gobernadora, envió las partidas correspondientes a todos los colegios, al igual que la escuela que exploto en la localidad de Moreno, pero nadie sabe en que otro rubro se aplicaron. Solo el juego a Néstor el juego le dejaba mil millones por día; perder el tiempo en esto ya resulta agotador, no habrá respuesta alguna, jamás la veremos a la Señora entre rejas y la joda continuará. Aquí se aprobara el boleto tantas veces como los empresarios así lo requieran, las playas seguirán estando sucias y no encontraras un baño público o químico en tu paseo, salvo que te tomes un café cada vez que tengas ganas de usar un toilette. Nos visitara un turismo berreta que nos regalaran su basura y que no invertirán una moneda en los días que por aquí pernocten. Solo una pizza de mala calidad y una gaseosa será su comida diaria, al igual que Cospelito deseaba, la Ciudad más barata de la costa. En Santa Cruz las cosas continúan absolutamente igual que siempre, siguen robando con la Obra Pública, un año sin clases y los K y sus familiares continúan en el poder. Esto es un tango con final de responso, creo que todos tenemos un poco de esa bella locura la cual nos mantiene andando, cuando todo alrededor es insanamente cuerdo. No importa hacia dónde vamos y a sus fanáticos tampoco, pero van. La pena de la cárcel ya les resulta absurdo y cómico; se agarran a piñas como chicos que salen de la escuela y nosotros miramos como con la nariz contra el vidrio tal cual mencionaba el tango. Santiago L Demaria