Los límites
se encuentran perdidos, nos encontramos cercanos a convencernos que somos un país
bananero. No pretenden convencer que alguno de nosotros, somos unos simples
boludos que andamos mirando noticieros con pauta paga.
Reclamos y
marchas, palabrotas de toda índole enmarcan a un Presidente que no necesita de
chusma para llegar a ser un ser humano exitoso.
Inútiles
solo registran pertenecer al Reino de una princesa que calza 45 y putea a todos
los que la rodean. Hoy todos marchan, en el caso de los Bancarios en donde las
empresas siempre han ganado más que ningún otro rubro; pero hacemos paro,
jodemos a la gente y nos pasamos un feriado de Carnaval ideal, como broche le
cargamos la culpa a Macri y listo.
También los
Casineros logran mostrarse en la Ciudad Turística para mantener el clima de
inestabilidad y molestias. Desde el Anses surgen los paros también, reclamando
que se encuentran despedidos aquellos que entraron por la ventana de la mano
del Reinado Patagónico.
Si Gendarmería
mato a un representante de pueblos originarios y luego fue otra cosa, si la
bestia de Hebe de Bonaffini no deja pasar a la justicia a la casa de las
Abuelas, no pasa nada.
Ezeiza se
encuentra esperando a varios ladronzuelos que todavía andan sacudiendo el
ambiente para generar más violencia, es la igualdad social que desde su tumba y
revolcándose el General devenido en Político, les inculco. Ingresaron por la
ventana en Municipalidades y entes centralizados hasta el último minuto previo
a la anterior administración y ahora marchan por sentirse ultrajados. Son los inútiles,
útiles de siempre; forman parte de un circo de mala muerte y es posible que
regresen; este país es tan grande que se da el lujo de continuar acumulando
basura.
Santiago L
Demaria
No hay comentarios.:
Publicar un comentario