Pues la pluma de Escritor empedernido lo llevo a cometer pecados jamás contados. Se ha dedicado a convertirse en un hombre serio y formal dedicado a relatar con lujo de detalles cosas que jamás me han importado. De solo pensar los momentos que hemos compartido, se me pianta una sensación extraña, evidentemente la relación de atención sobre la realidad hace perder los más grandes objetivos. El soñar es lo importante y el volar es dominar el mundo. Yo modestamente me dedicare a regresar a mis sueños, esto me limpia la cabeza. Hace brotar mis recuerdos, aquellas noches en que junto a Lambert y León, bebíamos hasta que nuestros ojos vieron algo que jamás imaginamos. Les digo que nos restregamos los ojos al comprobar que quien miraba, era un ser de una extremada belleza. Al subirla a la nave la luna se sobresaltó e iluminaba la escena con máxima claridad.
Ni lo recordara este hombre entregado al efímero poder de turno, Yo mis Duendes y esta hermosa Sirena, formaran parte de mi vida.
Prontamente variare mis objetivos y nos dedicaremos a volar, estamos preparando nuestra nave para esta nueva aventura, uno de mis Duendes amigos, el querido Zapallo, no varía su muy mala costumbre de ponerse su sombrero rojo, el cual le impide ver las cosas tal cual son.
Santiago Luis Demaria
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