lunes, 9 de julio de 2018
No cambio nada
Como nos vamos a dar cuenta en estas líneas, el afano forma parte de nuestra historia; llegado el día de nuestra Independencia y nuestros conocimientos trataran de narrar el principio del fin. Si lo trasladamos a la actualidad veremos que en ese momento el País se encontraba el riesgo. Podrán darse cuenta que la realidad supera a la ficción que nos cuentan hoy los multimedios.
Esos multimedios que son criticados por quienes mencionaremos más adelante. Ustedes vieron por esos medios que, la guita se enterraba, si era y es una forma de cultura local. Todo cambia con los años, pero nosotros jamás; somos lo que somos y tenemos que darnos cuenta que no tenemos solución. Días atrás el Presidente no pudo concurrir a Rosario por el día de la bandera, pues lo esperaban grupos de bestias que ni saben su pasado, ni que reconocen que ellos fueron paridos por la misma sangre y en el mismo lugar. Cuantos Primeros Presidentes tuvo nuestro país? , esto me hace recordar a la reunión en Chapadmalal cuando les cortaron la luz. Bernardino de la Trinidad González Rivadavia, hombre quien solicito el primer préstamo a Inglaterra y no lo pago. Desde 1826 al 27 de Junio de 1827, como algunos otros duro lo que dura un gas en el agua.
Justo José de Urquiza desde 1854 y1860 durante la Confederación Argentina. Luego entre el primer Pichichi pero con dos brazos con facultades extraordinarias fue Manuel Dorrego, si bien no concurría al Hermitage , ni corría en lancha con Menem entre 1827 y Diciembre de 1828, quien creía tener el máximo poder en el país.
Retomando el tema del que no afana es un gil, en plenas Invasiones Inglesas fue el Virrey Sobremonte quien se afano la Fortuna real. Cuenta la historia que en su escape rumbo a Lujan Sobremonte detuvo el carruaje que lo transportaba y enterró parte de esta fortuna.
Entonces remitiéndonos al presente, el esconder fortuna no resulta patrimonio de nuestros dirigentes contemporáneos, el robar forma parte de una cultura propia y es patrimonio Nacional.
En esos tiempos no existían jueces probos, ni fiscales a prueba de balas, ni policías coimeros; hemos progresado y vamos camino a perfeccionar nuestra manera de robar.
Creamos Sindicatos, ahora tenemos Diputados y Senadores con prontuario propio, hemos ampliado los Gabinetes y se han creado artistas partidarios de repartir la guita robada.
Pronto lograremos lo que un exitoso Presidente nos enseñó “estábamos al frente del precipicio y hoy dimos un paso al frente”.
Santiago L Demaria
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